miércoles, 3 de julio de 2013

LA DEUDA DE LOS LIBERALES

Comenzando el presente siglo, se producía un hecho político que creaba gran expectativa acerca de lo que sería el devenir histórico de Colombia, que ya por esa época sufría los primeros efectos de los cambios ocasionados por la Constitución del 91, que había establecido el Estado Social de Derecho, aquel modelo creado por los alemanes al comienzo del siglo veinte con las mejores intenciones sociales, pero que los neoliberales han manipulado para ponerlo al servicio del capitalismo rentista.

En el mes de septiembre de 2000 el Partido Liberal había realizado su Asamblea Liberal Constituyente y en ese evento había aprobado la plataforma ideológica y la plataforma política propuesta por la Sociedad Económica de amigos del País bajo la batuta de Hernando Agudelo Villa, donde se consigna un conjunto de fórmulas y alternativas sobre los distintos aspectos y problemas de la vida nacional, que aún tienen vigencia por la profundidad del significado y el trasfondo doctrinario que encierran. Ya el mundo había vivido el fracaso de las recetas socialistas con economías planificadas y totalitarismo estatal, por lo cual la alternativa política revolucionaria estaba descartada y simultáneamente se había consolidado el esquema neoliberal con imperio del mercado, cuyas consecuencias en materia de concentración de la riqueza y masificación de la pobreza se vislumbraban a gran escala, por lo cual la aparición en Colombia de una propuesta como la del Partido Liberal abría grandes posibilidades para un régimen de justicia social y crecimiento económico.

No obstante, hoy cuando la extrema derecha avanza a pasos agigantados construyendo su movimiento y se prepara para las próximas elecciones sobre la base programática ya conocida de defender los intereses de los ricos y privilegiar el capital financiero, conviene formular el interrogante sobre lo ocurrido con esa plataforma política; porque lo que vemos es un grupo de congresistas aplicando las mismas prácticas clientelistas, democrateras y corruptas de toda la vida. Un  grupo de politiqueros que a nombre del histórico partido siguen alimentando las aberraciones del régimen político colombiano, que han llevado al Estado a ser un simple medio para explotar lo público en beneficio particular.

Nos quedamos con los crespos hechos. Sin ninguna vergüenza ese partido eligió al hijo del Padre del Neoliberalismo como director único, sin ningún otro mérito que ser el hijo de su papá y por encima de un centenar de dirigentes con mayor experiencia, formación política, y liderazgo, solo para mantener esa organización en las manos de la corriente neoliberal que lo maneja desconociendo la citada la plataforma política, la cual estoy seguro, ninguno de los congresistas ha leído siquiera; y de paso, frente a la realidad del país, seguir acrecentando la deuda de los liberales. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario