En las técnicas modernas de
planificación la visión de ciudad ha sido un medio muy útil para definir
objetivos y clarificar el rumbo de la construcción colectiva de futuro. Por
eso, desde finales del siglo pasado los territorios han realizado múltiples
ejercicios tendientes a definir el ideal de ciudad, que se convierte en la
Estrella de David de los procesos económicos y sociales, aunque ha sido más
para cumplir un requisito metodológico en la elaboración del POT o los planes
de gobierno, que el producto de un consenso de los actores municipales
comprometidos con el futuro de largo plazo.
Cuál es la ciudad que queremos?,
es el interrogante central sobre el que gira la definición de la visión, que no
sea por capricho del gobernante de turno, sino como respuesta consecuente con
las realidades objetivas, la idiosincrasia y la vocación del municipio. Se
piensa en la industria, la agroindustria, el comercio, los servicios, el
turismo, etc., sectores tradicionales que a veces tienen potencialidades que le
imprimen factibilidad a la idea pero otras veces no.
En la literatura sobre
desarrollo regional del mundo postindustrial, se propone un bucle así: Sociedad
de la Tradición-Sociedad de la Información-Sociedad del Conocimiento-Sociedad
de la Creación; destacando el Cuarto Sector de la Economía, que le llaman el Sector
del Conocimiento, como alternativa para trazar una ruta hacia el futuro de
alcance nacional y en el contexto de la globalización. Así, en el debate sobre
la Visión de Popayán, no se debe descartar el uso de esa propuesta de la
reciente teoría del desarrollo, ya que la realidad nos ha mostrado los cuellos
de botella de esta ciudad para encausar su futuro en los tres primeros sectores
de la economía.
Popayán Ciudad de la Innovación
y la Creación, pero no tomada como lo han hecho en otras ciudades de Colombia
que consideran la propuesta como un apéndice marginal de la economía mediante
la realización de ciudadelas, planes parciales, zonas francas o cualquier otro
mecanismo de desarrollo territorial, sino como corazón o eje del proceso
colectivos centrado en la cultura, donde toda la comunidad municipal en su
conjunto, se concentre en la creatividad y la innovación no sólo en aspectos de
ciencia y tecnología, sino en las otras disciplinas de conocimiento y en la
ingeniería social que incluya las humanidades, las ciencias, sociales, las
artes y la filosofía. Si para algo son buenos los payaneses es para pensar.
La postmoderna teoría del
desarrollo ofrece una alternativa interesante para definir el ideal de ciudad
como norte para la planificación económica, social, ambiental, territorial e
institucional, lo cual también es un reto que obliga a destacar la necesidad de
fortalecer la gerencia pública territorial y así crear esperanzas que comprometan
a toda la sociedad municipal, que hoy se encuentra desconcertada ante el
incierto devenir histórico, de modo que sea un factor de motivación y
compromiso la visión de Popayán.