miércoles, 21 de septiembre de 2011

LA VOZ DE ANGELINO

Al escribir estas notas ya el Vicepresidente se había echado para atrás, después de que el lunes pasado desde Pasto, había desafiado al Presidente, pero aun así, bien vale realizar una observación al episodio de sus opiniones frente a situaciones del gobierno porque, si bien el Vice de manera prepotente dijo que a él lo había elegido el pueblo con más de nueve millones de votos desconociendo que esos votos no son de él sino de Santos, a quien le debe el cargo porque el Presidente fue quien lo incluyó en el tarjetón, en el alto gobierno sí hace falta quien le hable serio al Departamento Nacional de Planeación.

Los servidores del DNP están acostumbrados, desde cuando el Presidente Carlos Lleras les consagró como ídolos hace más de cuarenta años, a que se les rinda pleitesía y ni siquiera respetan al Congreso de la República. Ellos son simples tecnócratas que van a estudiar a Harvard, Chicago o Massachusetts donde les lavan el cerebro inyectándoles la doctrina neoliberal y los modelos que se derivan de esta, para que vengan a Colombia a imponer las medidas acordes con los intereses del capitalismo financiero internacional y en contra del pueblo colombiano. Desde 1958, el DNP ha sido un fiel servidor del capital extranjero y ahora, los más consagrados agentes del capitalismo rentista y arraigados defensores de los especuladores internacionales del dinero.

Las grandes vergüenzas del capitalismo financiero internacional han sido el desempleo y la pobreza, razón por la cual a toda costa tratan de ocultar estos fenómenos, o de inventar teorías para “demostrar” que tanto el uno como la otra, se deben a causas diferentes y que no son consecuencia del modelo universal de liberación y globalización financiera. Por eso las metodologías son internacionales y los promotores son los organismos multilaterales como el Banco Mundial, el FMI y el BID, cuya existencia se sustenta en la defensa de los grandes capitales del mundo, debidamente amparados por la Resera Federal de Estados Unidos.

El Vicepresidente de la República debe conservar la unidad de criterio con el Presidente en materia de políticas de gobierno, pero su derecho a opinar no se puede perder, más cuando no existe otra alternativa en el alto gobierno para que a los tecnócratas del DNP, que sólo piensan en defender a los ricos de Estados Unidos, de vez en cuando se les recuerde que aquí en Colombia hay pobres y que ahora se les debe tener en cuenta si no quieren escuchar la voz de Angelino.

miércoles, 7 de septiembre de 2011

LOS LAZOS CON LA NACION

La historia lo ha demostrado: ningún territorio colombiano puede salir adelante sin el apoyo de la Nación, razón por la cual lo peor que puede hacer un mandatario territorial, es enfrentarse con el gobierno nacional. Si bien la Carta establece la descentralización administrativa, que el gobierno anterior durante ocho años echó para atrás, el país cada vez más consolida el centralismo político que concentra las directrices de los procesos institucionales, sociales y económicos en Bogotá e igualmente el grueso de los recursos, aun los que por mandato constitucional, son de propiedad de los territorios y que circulan a través del sistema general de participaciones.

Los nuevos gobernantes territoriales que iniciarán período en enero del próximo año, tendrán que estrenar políticas nacionales. Aunque el actual gobierno nacional para esa fecha ya llevaría año y medio, el plan nacional de desarrollo apenas se aprobó en mayo del presente año y esta vigencia presupuestal fue aprobada antes de iniciar el mandato, por lo cual el nuevo plan propiamente inicia en pleno, en enero de 2012. Así, la obligada armonización de los planes de gobierno territorial con el nacional que establece la Ley 152 de 1994, se acomoda a las relaciones de temporalidad necesarias.

Los candidatos actualmente en contienda dispusieron oportunamente de la información para incluir en sus programas las propuestas pertinentes para lograr la complementación y el apoyo del gobierno nacional, con la ventaja de que el PND “Prosperidad para Todos”, en gran medida ha condicionado su éxito a la gestión de los departamentos. El espíritu de la prosperidad para todos gira en torno al desarrollo territorial y pretende disminuir la brecha entre las regiones avanzadas y las más atrasadas mediante una estrategia de elevar los niveles en las que están atrás, pero no sometiendo a las regiones a los tradicionales caprichos de Bogotá, sino empoderando y fortaleciendo las iniciativas locales y regionales, las cuales sólo pueden prosperar, si los gobernantes territoriales ejercen la adecuada función de convocatoria y liderazgo social, además de la debida gestión de los asuntos públicos.

Cauca es uno de los territorios importantes en el actual período. Las tasas de desempleo, la agudización del conflicto sociopolítico, la localización geográfica en el contexto nacional, las condiciones ambientales, los niveles de pobreza y demás aspectos sobre descomposición social, obligan a que los próximos gobernantes territoriales cumplan sus funciones en plena armonía con el gobierno nacional, razón por la cual en el próximo debate electoral, es absolutamente necesario evaluar en la propuesta de cada candidato a gobernador, la forma como se plantea el manejo de los lazos con la Nación